2 de junio de 2012

Amor y Final

Como si tuviese que salvar al mundo de uno en uno,
así era su misión.
Escondía una reivindicación tan grandiosa, 
como la de justificar una vida.
Mientras,
el mínimo tiempo  se iba descontando ante sus ojos.
Huía  dos horas   delante de su   verdugo, 
con  tensión de tigre  caminando entre hierros.
Lo último será   lo que perdure en lo eterno, pensaba.
Detenerse a beber el letal  paisaje
o seguir sosteniendo esa ínfima diferencia con el final..
Todo el tiempo transcurrido antes siempre estuvo muerto;
no se parecía en absoluto a esas horas definitivas
en las que el cuerpo exaltado lame las últimas gotas.
En las que el ancho cielo  se bifurca.
Palpar por fin ese  amor que se abre milagroso
para caminar despacio hacia el precipicio.







2 comentarios:

  1. Tremendo.
    Parece una agonía contada desde adentro.
    Es un texto difícil y hermoso.

    Un abrazo.

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  2. Muchisimas gracias, por tu tiempo, por leerme. Un honor compartir mis intentos poeticos :) .
    Bienvenidooo!!
    Abrazo
    Bea

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