Exacto

Lee las líneas de mis manos
Descifra estos latidos atropellados.
Haz pie en las islas pavorosas de mis abstracciones,
nádame por los costados..
Sube.
Desata esa furia dormida que me habita
pues ya no temo..
En sincronía,
la inmaterialidad
y mi cuerpo
vuelven a armarse frente a tu rostro.
No se que traes,
eso exacto que me falta.

Aún después

Que me lleves aún después de la derrota,
es que todavía creo en la vuelta del destierro..
Ínfimas monedas en los bolsillos,
el suelo quedó espeso de lanzas rotas..
Estratega silencioso, caminas..
Inútil querer ahogar pasiones,
vas delineando en tu mente la siguiente batalla..
Dolido espíritu,
agitado, que no resigna letras ni fuego..
Nunca se trato de acumular tierras, ni coronas.
Es dignidad de espacio,
de tiempo habitado,
la supremacía de la mirada transparente..
Ninguna falacia en nombre de la victoria,
ya sabes,
demasiadas sombras se alimentan en su brillo..
Son otras tus conquistas de guerrero,
tus fuertes certezas que prescinden de escudos..

Que me lleves aún después de la derrota,
es que todavía creo en la vuelta del destierro…

Subitamente

Tanto tiempo,
errante de un abrazo para rendirte.
Escarbando un blanco reparo en las sombras,
alivio del nocivo ruego.
Ejercer la compasión debilita hasta las fibras..
Preguntaste mil veces
donde queda esa esquina en la que se renuevan
los eneros..
Hasta allí irías..

Hoy el verde en las calles delata que brota tu cielo,
cuando todavía se sienten las asperezas,
restos de aquel hondo encierro.
Volver desde allí con olores impregnados de infierno
fue como extirpar clavo por clavo y no pretender más
encadenarse a sueños..
Cada pisada no es igual ..
Cada segundo se lleva algo seco..
Súbitamente bebes
de lo extraño,
de lo nuevo..

ENcrucijadas

El cuerpo desligado del espíritu
se mira a si mismo, desde afuera.
Extranjero en el tiempo que le pertenece...
Alguna vez se cruzaron razones, deseo, vida..
Un montón de ladrillos
queriendo ser parte de esa torre..
Pero si el temor se disfraza de indecisión
o viceversa,
es imposible construir cimientos..
Los castillos se dibujan con destreza en la mente..
Aunque el terreno real suele cubrirse de escombros..

Encrucijadas,
planteos,
cornisas que a veces hay que saltar..
Una y otra vez
se cuestionan las prolijidades,
se discuten los deberes,
quedan al descubierto los vacíos ..
Todo se revuelve adentro,
incomoda,
sangra, duele..

Tal vez podría esfumarse,
desaparecer..
Exiliarse en algún refugio..
Postergarlo una vez mas.
O salir a la ruta para encontrarse por fin
con uno mismo..

Incoherencias

Mis incoherencias

quedan al descubierto.

Me miras,

te confundo.

Enredo los cables de la ansiedad..

Y en el fondo,

lo sabes,

solo hay amor.

Pasiones me imperan,

revuelo de mares..

Bandadas asustadas carcomiendo el cielo.

Alertas que se encienden sin sentido.

La temperatura del alma en llamas..

Y en el fondo,

lo sabes,

solo hay amor..

La maquinaria se prende, se apaga..

Consume energía,

altera palabras.

Pero cuando llegas

inviertes mi entropía..

Abandono mis valijas,

rompo instructivos..

Respiro sin cadenas..

Cuando llegas,

solo soy..

Ambigüedad

La sospecha es roca candente,
magma subterránea que se desliza
debajo de las palabras que dices.
¿Que pretendes cuando nombras?
¿Qué insinúas cuando miras?
Buscas significados hasta en las dormidas arenas,
¿que más quieres saber?
Tu ojo vidrioso llega a las entrañas de mis sombras.
Esas delgadas manos podrían impacientar los hielos;
temo ser el agua que bebas de un solo sorbo.

Tu luz de imponente faro marca la orilla
y delata mi llegada..
Cúbreme el rostro para no verte,
acércate más..
De tu respiración están hechas mis tempestades.

Tu sueño de espadas

Me observas a través de la mirilla cerrada.
En el gris silencio que te envuelve
puedo escuchar tu sueño de espadas.
Esa sed de águilas desorientadas en la cima,
tu voluntad una y otra vez en bancarrota..

Corren presurosos tus corceles
con legados imposibles de descifrar.
Desfilan en vano destinatarios,
anónimos intentos de saberte.
No hay un rostro igual al de tu leyenda.
Inasible amor,
no hay mejor resguardo que las letras..

Gotas de ambigüedad recorren la frente,
lo que piensas, lo que puedes.
La mano que no escribe se siente enferma,
le temes a las plagas y al desierto..

En el gris silencio que te envuelve
puedo escuchar tu sueño de espadas..